Técnicamente, la mayoría de los dispositivos actuales tienen la capacidad de escuchar tu voz. Asistentes virtuales como Siri, Alexa o Google Assistant necesitan “estar atentos” para responder a comandos como “Oye Siri” o “Ok Google”.
Sin embargo, las empresas tecnológicas afirman que la escucha solo ocurre cuando activas manualmente el asistente o usas una aplicación con permiso de micrófono. Fuera de eso, el micrófono no debería estar grabando.